miércoles, 11 de marzo de 2009

Me doy cuenta que nada me viene bien. Ni la cercanía ni la lejanía. Como en el chiste ese de que en el primer piso bla, en el segundo blabla, etc....el de las porongas. Sabés de que te hablo? Porque me da fiaca contarlo. Debe ser por la lluvia. Que embole...todo el día lloviendo. Y todo el día intentando evitar que no te saquen el ojo con un paraguas. Ni da. Acá adentro también llueve. Porque mi casa tiene onda. Lo que sea. La cosa es que nada me viene bien. Así como eso. Hice mis cosas y todo. Como quería. Lo mismo me pasa con mi celu. Tiene una tapita que la sacás para poner los auriculares. Es chiquita y siempre se me pierde. Y cuando se me pierde me pongo mal porque siento que mi celu está incompleto. Pero siempre la vuelvo a encontrar. Y cuando la encuentro también me pongo mal porque la verdad es que me rompe bastante las pelotas tener que sacar una tapita para poner los aurículares. Entendés? NADA ME VIENE BIEN. Y no puedo evitar volver a poner la tapita a pesar de que la odio. La cosa, y lo que realmente quería decir con todo esto, es que tengo un novio comprensivo. En serio. Casi que me cuesta acostumbrarme.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola QQ :)
Te dejé un premio en mi blog!

Besitos

Anónimo dijo...

Jodita lo de QQ, es q me reí mucho leyendo que estuviste 15 minutos para entender lo que era, jajajaja.

Besotes!

Anónimo dijo...

Jajaja. Si! Ya lo voy a buscar mi premio! Grax!