viernes, 4 de enero de 2008
Mi antiguo amor solía decirme que me volvía loca cada vez que me venía. Yo se lo negaba a muerte...que si estaba loca es porque estaba loca y que no tenía sentido querer explicar mi dulce (?) locura a partir de eso. Hoy lamento admitir -y más lamento darte la razón a vos corazón- que cuando me viene se me cruzan los cables mal. Así que si me hubieses preguntado dos días atrás, te hubiese confesado que estoy muy gorda, que todo me queda mal y que nadie me quiereeeeee. Pero ya se me pasó. Es una de las ventajas de tener una personalidad excesivamente inestable y cambiante. Hoy volví a la normalidad y vuelvo a pensar que soy una diosa y de nuevo tengo mi autoestima más elevada de lo que debería estar. Odio mis 4 días mensuales de locura. Los odio.
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