viernes, 11 de abril de 2008

Hoy tuve hambre y tuve frío. Estuve enojada y provoqué un enojo. Me angustié, me desesperé y me tranquilicé un poco. Nunca vas a sentir en tu piel lo que siento en este momento. Nunca lo viviste y nunca lo vas a vivir. Por eso no lo entendés. Y no te lo puedo explicar. Porque me avergüenza mi debilidad. Me gusta planear mi semana. Programo cada una de las cosas que voy a hacer y lo que se sale de los planes me pone mal. Por eso mi segundo nombre es TOC. No es casualidad. Y esta vez no me pude resistir y al mismo tiempo que festejaba una semana "sin" caí en la tentación por no poder controlar mis nervios. Y me genera una culpa increíble. Porque no era algo que se incluyera en mis tan exigentes y poco flexibles planes. Sé que puedo hacerlo. Sólo fue un desliz. Pero te necesito. No para que me recuerdes la prohibición ni mi gusto a moneda. Tan sólo para que lo soportes por un tiempito. El tiempo que me tome no despertarme a mitad de la noche con una necesidad casi incontrolable. El tiempo que me tome no amanecer con una adicción tan fuerte que no me deja ni pensar. Yo sé que no lo entendés. Me alegra que no lo entiendas. Pero entendé mi frustración, mi cara de orto y mi mal humor. Sólo por hoy.

No hay comentarios: