Que decirte. Que me siento un poco naranja. Que me siento un poco ahogada. Que no voy ni para atrás ni para adelante. Ni a un costado, ni al otro. Que me odio. Que te odio. Que no sos amigo y no sos amiga si sólo lo sos cuando necesitás algo de mí. Yo no te necesito a vos. Nunca te necesito a vos.

Me doy cuenta que. No es tan malo ser naranja. Mucho peor es ser negro.

Me doy cuenta que es mejor no juzgar más, que es más fácil olvidar y que es divertidísima tu ignorancia. La tuya. La que juzga y no entiende. La que no entiende. La que no me entiende. Como si mis palabras no fueran palabras. Como si yo hablara y vos escucharas ladridos. Como cuando Marley me habla. Cuando yo le hablo a ella. Pero nos entendemos. Porque así es muchísimo más fácil. Y así nos queremos más.

Queramos más. Tenemos que querer más.