Podría haber terminado el día bien. Es una opción. Pero por supuesto siempre hay algo que me pone del recontra orto. Hoy ninguna de las cosas que en ocasiones me ponen de mal humor pudieron afectarme. Ni los 800 clientes hincha pelotas preguntando gigantes y verdaderas pelotudeses -por ejemplo, si el talle large es más grande o más chico que el medium, si se puede pagar con tarjeta (sí, idiota, no estás en un kiosco) o, la mejor de todas, cuando me preguntan si trabajo ahí (no, no trabajo acá pero los domingos mientras todos los demás boludean y descansan a mi me gusta ponerme un uniforme y fingir que soy una empleada de Zara). Tampoco me afectó que se me haya terminado el papel del posnet cuando estaba haciendo el cierre de caja y en consecuencia tener que contar y sumar los cientos de cuponcitos que se habían acumulado durante todo el día. Tampoco me afectó mi casa hecha un verdadero caos, mi maldita estufa sin funcionar en la semana más fría del año y que mi pelo en un momento del día decida espontáneamente ser completamente inmanejable. Todo todo todo me importa un carajo. Señor, el talle large es más grande que el medium. Señor, si quiere pague con patacones, sinceramente me importa una mierda. Señor, sí, lamentablemente trabajo acá. TODO me importa un carajo.
Pero esto no. Esto me pone del recontra orto. Ir a cambiarme y que mi locker esté abierto me pone del recontra orto. Buscar plata en la billetera para tomarme un remis y darme cuenta que no tengo más mi plata me pone del recontra orto. Hacer memoria y finalmente concluir que esa plata la tenía en la billetera al llegar al laburo y que no la gasté en nada me pone del recontra orto. Deducir que las hijas de puta de mis compañeras me robaron $70 mugrosos me pone del recontra orto. Ustedes putas de mierda. Me ponen del recontra orto. La gente muerta de hambre me pone del recontra orto. Tener que terminar un día casi perfecto así me pone del recontra orto.
Catarsis.
Y para ustedes karma. Todo vuelve.
Pero esto no. Esto me pone del recontra orto. Ir a cambiarme y que mi locker esté abierto me pone del recontra orto. Buscar plata en la billetera para tomarme un remis y darme cuenta que no tengo más mi plata me pone del recontra orto. Hacer memoria y finalmente concluir que esa plata la tenía en la billetera al llegar al laburo y que no la gasté en nada me pone del recontra orto. Deducir que las hijas de puta de mis compañeras me robaron $70 mugrosos me pone del recontra orto. Ustedes putas de mierda. Me ponen del recontra orto. La gente muerta de hambre me pone del recontra orto. Tener que terminar un día casi perfecto así me pone del recontra orto.
Catarsis.
Y para ustedes karma. Todo vuelve.
1 comentario:
Que divinas tus compañeritas. Comparto tu indignación. El Karma va a llevarles herpes. Palabra. Y quizás alguna enfermedad venérea. O las dos. O nada de eso, y se saldrán con la suya. Ahí es donde tenés que averiguar quién fué así le desfigurás su cara de putita a patadas. Ja ja!, el Karma es mágico.
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